Metalquimia y la creativación

Hace pocas semanas tuve el honor de visitar una de las empresas tradicionalmente más innovadoras de España: la gerundense Metalquimia (maquinaria y tecnología para la industria cárnica). Su director, Josep Lagares, me explicó con todo detalle cómo gestionan la innovación. De hecho, no la llaman así, sino creativación, es decir, de qué manera las ideas o la creatividad se pueden transformar en innovación o resultados.
Algunas lecciones magistrales que me llevé de la visita:
– A Metalquimia tienen claro que para ser creativadores es necesario construir en paralelo una cultura también creativadora: juegos, ejercicios creativos online, sesiones de generación de ideas, intranet … Allí se vive la creativación en todo momento, sin respiro. “Es muy importante -me dijo Josep Lagares- que la gente creative en todo momento, que no se olvide, que incorpore esta manera de hacer cada día, aunque sea un ratito …”
– Una frase me llamó poderosamente la atención: “Disrupt, or you will be disrupted”, que podríamos traducir como “Sé rompedor (disruptivo) o te romperán”. Efectivamente, Metalquimia se ha esforzado en los últimos años para diferenciarse de los competidores y ser capaz de crear tecnologías del procesamiento de la carne disruptivas. Un ejemplo es su proceso QDS (Quick-Dry-Slice) que permite pasar de 40 días (tiempo que necesita un embutido para secarse) a 40 horas. La diferencia es que el cortan previamente y lo someten a unos procedimientos de secado ultra rápidos.
– Interesante también la idea de contratar gente muy creativa. Ojalá lo hicieran más empresas! Metalquimia procura que sus directivos y colaboradores sean gente espabilada, proactiva, con ganas de pensar “fuera de la caja” y de innovar constantemente. “El Talento trae más talento”, me dijo José.
– Pero una de las claves fundamentales del proceso de innovación de Metalquimia es la capacidad de hacer prototipos de las ideas prometedoras, en colaboración con algunos clientes que se prestan. En la línea del Design Thinking, cualquier proyecto que pasa los filtros de selección (que son muy rigurosos) se prototipan y se prueban con el fin de asegurar su eficacia y la rentabilidad (lo que en innovación recibe el nombre de Mínimo Producto Viable).
En este caso me encontré una empresa alegre, comprometida, metódica, dirigida por una persona entusiasta, exigente y que predica con el ejemplo. Ya se sabe que todo proceso de innovación debe ser inspirado desde la dirección o la propiedad.
Bravo, Metalquimia.